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Las primeras palabras que tu bebé aprende hacen referencia a aquellos objetos que comúnmente se encuentran en su entorno. Por ejemplo, si dices “biberón” quizá voltee a ver este objeto o realice algún gesto que te indique que está comprendiendo de qué estás hablando aun cuando tu pequeño todavía no logre pronunciarla, ya que comprende más palabras de las que logran decir.
Incluso aunque comience a hablar, observarás que presenta errores para pronunciar la palabra que intentan decir, como llamar “bibi” al biberón. Puedes realizar algunos juegos para ayudarlo a decir sus primeras palabras:
Imiten onomatopeyas. sonidos de objetos y animales. Las onomatopeyas son los sonidos que producen los objetos o animales, por ejemplo: “run-run” para referir un auto, o miau en el caso del gato. Estos sonidos frecuentement atraen la atención de los bebés y mantienen una estrecha relación con el animal u objeto al que hacen referencia. Al jugar a imitar estos sonidos lo ayudas a ejercitar músculos de su boca y cara necesarios para aprender a pronunciar palabras.
Jugar a soplar. Aprender a modular el paso del aire por la boca, es una habilidad necesaria para hablar. Puedes observar que la salida que realizas del aire, es más explosiva cuando pronuncias palabras con /p/ que con palabras con /b/. Por lo cual ejercitar el paso del aire de gran utilidad, ya sea que lo realicen apagando velitas, formando burbujas de jabón, o soplando un rehilete.
Enseña canciones cortas. La música ayuda a muchos bebés a prestar atención. Puedes aprender canciones cortas que puedas repetir con regularidad mientras estás con tu bebé. Acompañar la melodía con palmadas que marquen el ritmo también podrán ayudarlo a recordar las palabras.
Jueguen a platicar. Muchos bebés comienzan a balbucir alternando turnos antes de pronunciar palabras. Préstate a realizar estos diálogos de balbuceo mediante los cuales tu bebé ejercita los músculos de boca y cara necesarios para el habla. Además, reforzarás otros aspectos importantes del diálogo, como el respetar turnos y mantener la interacción durante la comunicación.
Muchos bebés también realizarán gestos para comunicarse, ya sea señalando algo que les ha llamado la atención o para pedirte que realices algo por ellos. Es importante que también refuerces estas interacciones, para que tu pequeño ejercite la comunicación no verbal.
Fuentes
