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Las prácticas durante la higiene de trastes y utensilios para la alimentación, influyen en el estado de salud de los bebés. Basta un pequeño número de microorganismos para causar una infección. Por lo que una mala práctica de higiene conlleva a enfermedades gastrointestinales. Por ello, la Organización Mundial de la Salud recomienda que todo el material que se utilice para alimentar a los bebés, sea esterilizado y limpiado concienzudamente antes de utilizarlo. Para lograrlo, puedes considerar lo siguiente:
Revisa los utensilios de limpieza. Estos deben estar limpios y en adecuado estado antes de usarse. Puedes lavar los escobillones para limpiar biberones después de usarlos, y así evitarás que los restos de comida se adhieran al mismo. En caso de que corran el riesgo de ensuciarse por polvo, considera volverlos a lavar antes de utilizarlos. También puedes utilizar paños de un sólo uso para secar cucharas y platos, o bien asegurarte de mantener limpias las toallitas de tela antes de secar los trastes de tu bebé.
Tener tus manos limpias salva vidas. Por ello es fundamental lavártelas con agua y jabón antes de limpiar los trastes o preparar alimentos. También deberás realizarlo antes y después de otras acciones cotidianas como ir al baño o cambiar el pañal de tu bebé.
Limpieza de trastes. Conviene lavar con esmero cada una de las mamilas, cucharas, tazas, platos y biberones. Para ello, es importante que cuentes con una solución jabonosa y, de preferencia, utilizar agua caliente. Los materiales como el látex, silicona o acero inoxidable, han mostrado ser muy útiles para la elaboración de mamilas, tazas, biberones para los bebés. A pesar de sus beneficios, a estos materiales se les fija con facilidad pequeñas partículas del medio ambiente, por lo que es necesario que sean lavados escrupulosamente para retirar biopelículas de microorganismos que sean focos de infección. Una vez tallados, los trastes deben ser enjuagados con agua limpia.
Limpieza de Biberones. Es importante lavarlos con escobillones dobles para mamila y biberón limpios. Podrás frotar el interior y exterior de biberones y mamilas para eliminar los restos de alimentos en ellos contenidos.
Esterilización. Es un paso fundamental que no puedes saltarte. Puedes realizarlo mediante el método tradicional, que consiste en hervir suficiente agua limpia en un recipiente con agua y sumergir por completo cada uno de los trastes. Sin embargo, este método tiene la desventaja de que algunos de tus trastes pueden dañarse por el exceso de calor. Para evitarlo, te sugerimos utilizar un Esterilizador de la línea Advanced de Evenflo, ya sea para Microondas o nuestro nuevo modelo de Esterilizador Eléctrico Advanced, que también calienta. Ambos son de fácil uso y mantendrán en buen estado los trastes de tu bebé.
Después de limpiar y esterilizar los utensilios y trastes, evita sacarlos del esterilizador hasta que los vayas a utilizar. Así evitarás la recontaminación por el contacto con el ambiente. Si necesitas llevar los trastes a otro sitio, deberán estar completamente secos y conviene que los guardes en un recipiente limpio y esterilizado, o bien llevar un esterilizador portátil como nuestro modelo Mini. En el caso de los biberones, puedes ensamblarlos por completo para evitar que el interior de la botella y el exterior de la mamila estén en contacto con el medio.
FUENTE:
Organización Mundial de la Salud (2007) Preparación, almacenamiento y manipulación en condiciones higiénicas de preparaciones en polvo para lactantes. DIRECTRICES. Suiza. ISBN 978 92 4 3595412
