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En días de frío, las infecciones en vías respiratorias son más frecuentes entre la mayoría de las personas. Para proteger a tu bebé y disminuir la probabilidad de que se enferme, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades Respiratorias (NCIRD) brindan algunas recomendaciones que aquí te compartimos:
Mantén actualizada su cartilla de vacunación. Las vacunas para la influenza ya son recomendadas en muchos bebés después de los 6 meses de edad. Tu pediatra podrá indicarte si tu bebé está listo para recibirla. También podrás consultar con el médico si en ese momento ya es recomendable que los adultos al cuidado de tu pequeño también se vacunen. Mantenlo alejado de las personas enfermas. Tú y las personas que están al cuidado de tu bebé también deben evitar entrar en contacto con estas personas. Disminuirás así la probabilidad de contagio.
Lava tus manos antes de tocar a tu bebé. Debido a que en esta época estas infecciones son más frecuentes, es posible que toques o entres en contacto con objetos o muebles que hayan sido contaminados por virus o bacterias. Por ello es recomendable que antes de tocar manos, ojos, nariz o boca de tu bebé, laves tus manos con agua tibia y jabón durante 15 a 20 minutos.
Evita que tu bebé esté en contacto con el humo, cloro y químicos. Los pulmones de tu bebé aún continúan madurado y son más sensibles al contacto con estos estímulos. Entre ellos se incluyen el humo de cigarro, fogatas, o cualquier otra fuente de humo. En el caso del cloro, evita que esté en contacto con albercas. Y al momento de lavar pisos u otras superficies, puedes optar por vinagre, bicarbonato de sodio con sal o agua oxigenada.
Brinda una alimentación saludable. Una adecuada nutrición es fundamental para prevenir infecciones en vías respiratorias. La lactancia es la mejor forma de protegerlo. Si estás amamantando puedes incluir en tu dieta alimentos con vitaminas A, C, D y minerales como el hierro y zinc. Si tu bebé ya inició la alimentación complementaria, incluye alimento con estos nutrientes para mejorar las defensas naturales de tu bebé. Prepara sus propios alimentos para asegurar la calidad de los mismos, con el Multiprocesador de Alimentos Advanced.
Verifica el incremento de peso de tu bebé. El aumento de peso saludable es un factor muy importante para mantenerlo saludable. Tanto el bajo peso como el sobrepeso son factores de riesgo de infecciones en vías respiratorias. Verifica en sus citas con el pediatra que tu bebé incrementa de peso acorde a lo esperado para su desarrollo.
Estas recomendaciones ayudarán a disminuir el riesgo de infección. En caso de que tu bebé presente síntomas que te sugieran contagio (cambio en la cantidad de pañales utilizados, cambios en su apetito, fiebre, tos, secreción nasal, fatiga, vómito y diarrea) acudan con el pediatra para que reciba el tratamiento más adecuado.
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FUENTES:
World Health Organization (2001) Strategy for prevention and control of chronic respiratory diseases. Consultation of Development of a Comprehensive Approach for the Prevention and Control of Chronic Respiratory Diseases. WHO/MNC/CRA/02.1 Genova.
Bernard A., Nickmilder M. (2006) Respiratory health and baby swimming. Arch Dis Child. 91:620-625
Herr M, Just J, Nikasinovic L, Foucault C, Le Marec AM, Giordanella JP, Momas I (2012) Risk factors and characteristics of respiratory and allergic phenotypes in early chilhood. J Allergy Clin Immunol. 130(2): 389- 396 dx.doi.org/10.1016/j.jaci.2012.05.054 https://espanol.cdc.gov/enes/flu/protect/whoshouldvax.htm
